Historia corta: El sol

El sol salió finalmente luego de unas semanas de duro y húmedo invierno. Salió con energía y con una fuerza de mil dioses. Yo abrí las ventanas y lo dejé tocarme la piel, mis cabellos; todo mi cuerpo sintió el tierno abrazo del sol. Mientras lo sentía recordé por un micromomento un escena. Y esSigue leyendo «Historia corta: El sol»

El show del pánico

El otro día presencié un show. Fue bastante peculiar. Pero de todas formas me pareció  entretenido: Era una chica bailando ballet, eso no tiene nada de gracioso o extraordinario en sí mismo, ella bailaba ballet en un parque de diversiones justamente en la nueva atracción que era un barco pirata. Me pareció algo incongruente, peroSigue leyendo «El show del pánico»

Café de mediodia

De niña a Victoria le encanata un montón escuchar las conversaciones ajenas. Tenía una necesidad clara y nítida de comprender lo que le pasaba al otro a través de cuentos de pasillo o por el boca a boca. Ella comprendió muy rápidapidamente, a los ocho años, que la información tenía un valor incalculable, y laSigue leyendo «Café de mediodia»

Tengo ganas de mi-arte

No tenía cabeza para nada más. Desde que el profesor de arte nos indicó que para la próxima clase debíamos entregar nuestro proyecto final, sólo en eso podía pensar; era mi obra maestra. Lo empecé a diseñar desde que el profe nos informó que lo debíamos de entregar al final de la cursada, cito textualmenteSigue leyendo «Tengo ganas de mi-arte»

Cuento Corto: Sin Paz

Jamás imaginé que algo así pudiese ocurrirme. Yo estoy en un cuartito blanco, pulcro y vacío. No hay indicios de que nadie alguna vez hubiese estado allí. De alguna forma, es triste que nadie más haya tocado este lugar. Es como si el mundo hubiese nacido con este cuarto blanco poco hospitalario. Es un pocoSigue leyendo «Cuento Corto: Sin Paz»

¿De quién es el miedo?

Soñé que mucha gente lloraba reunida en un lugar. Lloraban genuinamente porque algo muy triste estaba ocurriendo (o estaba por ocurrir). Parecía que la melancolía los invadía. Vi a la personas, en su mayoría conocidas, algunos iban cabizbajos otros como buscando algo, de alguna forma algo inquietos o como incomodos. Miraban las caras de lasSigue leyendo «¿De quién es el miedo?»

Los deditos de las manos los ded…

El miedo a la vida me parece que es de lo más normal que hay. Aquí, en Buenos Aires nos volvemos locos no sólo por el gen Europeo del Este u del Oeste si no porque a la larga es más fácil ser el vagabundo de la esquina que el señor que tiene que tenerSigue leyendo «Los deditos de las manos los ded…»

Dividido entre 1

Cuando ella tuvo conciencia, ya eran las seis de la tarde y el cielo ya estaba oscuro adornado con la acostumbrada neblina. Su mejor amiga le llamó para invitarla a una fiesta que le encantaría, y como su dinámica era siempre muy tranquila ella aceptó sin mucho problema. Quedaron en encontrarse todos en el parqueSigue leyendo «Dividido entre 1»

Cosas de Muchachos

Estos muchachos se han reunido muchos domingos para ver a su equipo jugar como nunca, y perder como siempre. Pero eso no les quebraba el espíritu, más bien parecía que les volvía más y más fervientes a él. Vestían sus camisetas granate y llevaban, banderas pancartas, trapos, para manifestar ese amor que ha nacido espontáneamenteSigue leyendo «Cosas de Muchachos»

El rubio del trabajo

Yo trabajo en varios lugares alrededor de esta ciudad. Y me gusta eso. Bueno, hay días en los que me gusta más que en otros, pues en algunos me lleva el diablo porque quiero dormir, o más comúnmente, quiero comer. Ya había acabado mi jornada laboral, bien tarde ya. Era de noche, pero aquí esSigue leyendo «El rubio del trabajo»